Cremas hidratantes y dermatitis atópica

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La dermatitis atópica afecta hasta el 20% de niños en nuestro medio. Su piel se caracteriza por una sensación de sequedad mayor de la habitual fruto de un defecto estructural en la misma. Digamos que no funciona de forma adecuada y esto hace la barrera cutánea se altere, favoreciendo la inflamación de la misma.

De esta forma, la combinación entre una barrera alterada y una inflamación cutánea desembocan en brotes de eczema/dermatitis que generan picor y malestar en quien la padece.

¿PARA QUÉ SIRVE LA CREMA HIDRATANTE EN LA DERMATITIS ATÓPICA?

La hidratación de la piel se considera una estrategia útil ya que no solo mejora la sequedad, sino que también ejerce como barrera frente a agentes irritantes y puede tener cierto efecto antiinflamatorio. No obstante, recordemos que si la dermatitis está en fase de brote (es decir, hay zonas rojas, descamadas y con picor), dichas zonas deben tratarse con un medicamento (corticoides o inhibidores de calcineurina en crema).

Esta revisión de Cochrane publicada en 2017 concluye que el uso de cremas hidratantes supone un respaldo al tratamiento activo (tratamiento médico del brote). Parece que la dermatitis de las personas que hacen uso diario de cremas hidratantes tienen una mejor evolución ya que:

  • pasa más tiempo entre brote y brote
  • se reducen el número de brotes
  • se reduce la cantidad de corticoide necesitado para el control del brote

CÓMO Y CUÁNDO APLICAR LA CREMA HIDRATANTE EN LA DERMATITIS ATÓPICA

Recordemos que el uso de crema hidratante se aconseja especialmente en aquella piel «sana», es decir, las zonas de piel donde no se observa actividad de la enfermedad en forma de rojez o sequedad. Aplicar hidratante sobre zonas con inflamación no suele aportar grandes beneficios y puede incluso irritar más el eczema, empeorando los síntomas.

Se ha visto que el momento más oportuno para realizar esta aplicación es justamente después de la ducha o el baño. Lo ideal es retirar el grueso de la humedad con una toalla y en ese momento aplicar la crema, de tal manera que «selle» la humedad dentro de la epidermis y ese agua no se evapore, lo cual ocurriría de dejar pasar más tiempo hasta la aplicación de la crema.

DIFERENTES TIPOS DE CREMAS HIDRATANTES

Existe una disponibilidad enorme de productos hidratantes para la piel. Tanto en farmacias como en grandes superficies podemos encontrar numerosísimos envases, de tamaños y precios de lo más variado.

Existen formulaciones en crema, loción, gel o bálsamo. Que el producto sea etiquetado de una u otra manera depende de la proporción de agua y aceite que lleve cada uno de ellos, siendo las lociones mucho más fluidas que los bálsamos, por ejemplo. Pero, ¿sabemos cuál es el idóneo para la piel de nuestro hijo?

Partiendo del punto de que la dermatitis atópica se caracteriza por una deficiencia en el manto lipídico de la piel, la recomendación general por parte de los dermatólogos y pediatras es el uso de productos untuosos que refuerezen esta barrera. En teoría un bálsamo parece que debe ser más efectivo que una loción fluida, por ejemplo. Sin embargo, estos productos más gruesos y grasos suelen ser más incómodos en la aplicación, lo cual puede llevar a una menor constancia en la rutina y por tanto una pérdida de los efectos positivos de su uso diario.

¿HAY ALGUNA CREMA MÁS EFECTIVA?

En línea con esto, recientemente se ha publicado un estudio en la prestigiosa revista The Lancet Child & Adolescent Health cuyo objetivo era definir si existen didferencias entre los diferentes productos, y sus texturas. Se realizó un estudio aleatorizado con 550 niños de entre 6 meses y 12 años, a cuyos padres se pidió que aplicaran crema dos veces al día. Se hizo un seguimiento de 16 semanas al final del cual se evaluó si alguna de las formulaciones tenía mayor efecto positivo en la dermatitis.

En contra de los esperado, no se observaron diferencias en cuanto al número e intensidad de brotes entre aquellos niños que usaban hidratantes más fluidas o aquellos que usaron bálsamo.

EN CONCLUSIÓN…

Tras la publicación de este trabajo parece sensato seguir teniendo presente la importancia del uso diario de productos hidratantes en personas con dermatitis. Sus resultados, sin embargo, resaltan la ausencia de evicencia en cuanto a superioridad de unos productos frente a otros.

¿Le pones crema hidratante a tu niño?

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