Tenemos claro que el SARS-CoV2, causante del COVID-19 no puede atravesar la piel. Para infectarnos, este virus necesita unirse a una proteína llamada ECA2, que se encuentra, por ejemplo, en las células de la mucosa nasal y oral. En la piel, sin embargo, no está presente.
Esta es una buena noticia: el virus no puede contagiarnos a través de las manos si tocamos alguna superficie donde se encuentre el virus SARS-CoV2. Pero entonces, ¿por qué tanta insistencia con el lavado de manos?
El virus resiste días en diversas superficies
Un grupo de investigadores australianos ha publicado recientemente un trabajo en el cual muestran durante cuánto tiempo se detecta el virus en diversas superficies no porosas, alcanzando hasta una duración de 28 días.
Estos autores además comparan si la persistencia se relaciona con la temperatura y confirman que sí: el virus resiste mejor cuanto más baja sea la temperatura y peor cuanto más alta. Esos 28 días a 20ºC serían solo 24 horas a una temperatura de 40ºC.
Esto quiere decir, que al tocar ciertas superficies que hayan estado en contacto con alguien infectado por coronavirus (aunque esto haya ocurrido hace días), aunque el virus no atraviese la piel, podríamos trasladar el virus a nuestra mucosa oral o nasal con las manos. Pero, ¿cuánto tiempo aguanta el SARS-CoV2 en la piel de nuestras manos?
El virus vive hasta 9 horas sobre la piel
Pues bien, ya se intuía pero recientemente un equipo de investigadores japoneses de la universidad de Kyoto han demostrado que el SARS-CoV2 puede permanecer sobre la piel humana hasta 9 horas. Esta duración es mucho mayor que el virus de la gripe, con el cual lo comparan (y permanece en la piel menos de dos horas).
Esto aumenta las probabilidades de contagio a través del contacto en comparación con otros virus a los que estamos más habituado y refuerza, estas dos ideas:
- La importancia de lavarnos las manos frecuentemente: tanto el lavado de manos como el uso de gel hidroalcohólico eliminan al virus de la piel..
- La necesidad de hacer un esfuerzo grande por no tocarnos la cara. Si entre lavado y lavado de manos, contactáramos con alguna superficie contaminada, y el virus quedara en nuestra piel, el no trasladarlo a las mucosas(ojos, nariz, boca), evitaría el contagio.
